miércoles, 9 de marzo de 2011

Fusión Nestlé-Soprole... Dicho y Hecho


Fusión Nestlé-Soprole nuevamente a la palestra. Respecto a lo que leí del tema, creo que esta información publicada en el diario "Las Últimas Noticias" es la más explicativa en términos simples. La fusión Nestlé-Soprole es criticada fuertemente en un informe de la Fiscalía Nacional Económica. Además el gobierno, a través del Ministerio de Agricultura también se hizo presente en pos de la defensa de la competencia. Aunque ante los últimos hechos acaecidos con el anterior gobierno de Michelle Bachelet y AES Gener, nunca se sabe que hace el gobierno de forma privada, aunque públicamente manifieste una posición.

miércoles, 2 de marzo de 2011

Rechazo hacia el gobierno... ¿lógico acontecer?


Mientras veía el informativo de mega, tranquilamente en el sillón de mi hogar, me toca ver la noticia de la baja en la aprobación del gobierno de Sebastián Piñera y un alza en el rechazo al mismo, ambos en 4%, según datos de la
encuesta Adimark. El Ministro del Interior Rodrigo Hinzpeter también baja su aprobación. Luego, en la misma noticia, aparece el citado ministro opinando sobre el hecho. Para mi sorpresa, construye su argumentación sobre premisas falaces, es decir, falsas, o más bien, da por supuesto cierta naturaleza excluyente entre una y otra.

"Los Gobiernos tienen dos alternativas: se preocupan de las encuestas y en ese afán se despreocupan de las necesidades de los compatriotas o cumplen con las promesas empeñadas a los chilenos"

El cumplimiento de los compromisos, tal como argumenta el ministro, probablemente se vería reflejado en las encuestas. La preocupación por lo que dicen las mismas, no debería llevar a una despreocupación de las necesidades de los chilenos, más aún, es una retroalimentación que permite visualizar cómo los chilenos (en promedio) evalúan al gobierno y su gestión.

Según Hinzpeter, gobernar implica, a veces, llevar a cabo acciones que pueden ser impopulares (cómo el deseo de aumentar el precio del gas en la región de Magallanes; la venta de las sanitarias, post-natal no para todas las chilenas, lentitud en la reconstrucción, entre otras) y en vista de esas decisiones "difíciles" no se deja contenta a la población, pero, al fin y al cabo, "hay que proceder por el bien del país" aunque a la mayoría no le caiga en gracia.

Este tipo de decisiones, sumado al vergonzoso apoyo que le da el gobierno a la intendenta del Bio Bio, Jacqueline Van Rysselberghe, obviamente se vió reflejado en un rechazo de la población al actuar del gobierno. Se prometió un cambio en la forma de gobernar, transparencia, invertir en energias limpias, sin cuoteos, mantener y fomentar reformas sociales. ¿Qué es lo que tenemos? Respaldo a dicha intendente, privatización de recursos básicos como es el agua, aprobación de centrales termoeléctricas, alzas en los precios (no precisamente derivados del libre mercado), una lentitud en la reconstrucción post-terremoto que contradice la eficiencia que predica el gobierno. (más de 170.000 subsidios asignados, no ejecutados, es decir, está listo el papeleo, pero no se ha puesto ni una sola piedra de las nuevas viviendas y, solamente 1.400 familias que están con todos los trámites hechos y ya instalados en sus nuevos hogares)

Es hora de que vayan preocupándose un poquito más de las encuestas, ya que son el reflejo de lo que la gente ve que está haciendo el gobierno y, claramente, hay muchas cosas que se están pasando por alto.

viernes, 25 de febrero de 2011

En busca del "No-Yo"


Hoy me alejaré de los análisis económicos, morales u otras cosas que escribo. Me he alejado de escribir, porque tengo que encontrar algo que me incite a ello, una inspiración, y creo que hoy lo he vislumbrado nuevamente.
Hoy solamente haré un "copy-paste" (literalmente) de una obra que estoy en proceso de lectura denominada "Siddhartha", escrita por Herman Hesse. Una obra bastante corta, pero con un poder o influencia bastante grandes si se la toma en serio para iluminar el camino de la vida. Es una novela que relata la vida de Siddhartha para convertirse en un Buda. Si bien existen variados libros de iniciación al budismo y, otros que indican temas más específicos de esta búsqueda y, los cuales también influenciaron de gran manera mi ser en el último tiempo, esta novela fue un poco más allá, en el sentido de que encontré algo que había pasado por alto en todos los otros libros de esta índole que han pasado por mis manos. Y es cosa curiosa que lo encontrara en un libro tan simple, en el cual mis expectativas no eran mayores que a la de cualquier otra novela y, que a la vez, analizando cada palabra se encuentre algo tan relevante.
Hace tiempo ya, que dentro de mis pensamientos habita la búsqueda de esa verdad, ese "No-Yo", volverse inmune al sufrimiento, mediante la supresión de todo deseo, sueño y acto. Solamente mediante ese camino (el cuál es lógico) se puede alcanzar el "Nirvana" o estado Supremo, el "No-Yo". Dejar la individualidad y empezar a ser parte del todo, volverse indiferente al sentir emocional y físico de uno mismo. En términos relativos, es morir interiormente, mas no físicamente (ya que aún se posee un cuerpo, aunque controlado en sus sentidos y necesidades), ya que al suprimir todo deseo, sueño o actuar, se deja de tener una esencia individual para unificarse con el todo.
En varias ocasiones he estado por entrar y conocer templos budistas, por ejemplo, pero me encontraba y me encuentro con un obstáculo mental, el cual es bastante simple: Esta búsqueda es individual. Cada uno llegaría a encontrar este estado, solamente recorriendo un camino trazado por uno mismo en esa búsqueda. Mas no encontrando una doctrina, uniéndose a ella y aprendiendo y siguiendo sus enseñanzas, cual cordero que sigue a su pastor. El "No-Yo" no se encuentra de esa manera. Quizás esa forma sea parte del camino, pero no es EL camino. Existen experiencias, vivencias, entrenamiento mental, creencias y supresión del deseo que se encuentran a lo largo de la vida, creyendo genuinamente en el objetivo a alcanzar. No es un aprendizaje constante, el aprendizaje no lleva al "Nirvana", la búsqueda constante de la muerte interior es lo que lleva a esto.
Bueno, dejo un extracto del libro citado anteriormente, para graficar parte de lo que he escrito antes:
"Ayunó durante quince días. Ayunó durante veintiocho días. La carne desapareció de sus muslos y mejillas. Ardientes sueños oscilaban en sus ojos dilatados; en sus dedos huesudos crecían largas uñas, y del mentón le nacía una barba reseca y despeinada. La mirada se le tornaba fría cuando una mujer cruzaba por su camino; la boca expresaba desprecio, cuando atravesaba la ciudad con personas vestidas elegantemente. Vio negociar a los comerciantes, y cazar a los príncipes; presenció el llanto de los familiares de un difunto; advirtió cómo las prostitutas se ofrecían, cómo los médicos se preocupaban de los enfermos, cómo los sacerdotes determinaban el día de la siembra, se percató de que los amantes se querían, de que las madres daban el pecho a sus hijos. Y todo ello no era digno de la mirada de sus ojos, todo mentía, todo apestaba; olía todo a hipocresía, todo aparentaba tener sentido y felicidad y belleza, mas, sin embargo, todo era ignorancia y putrefacción.
Siddharta tenía un fin, una meta única: deseaba quedarse vacío, sin sed, sin deseos, sin sueños, sin alegría ni penas. Deseaba morirse para alejarse de sí mismo, para no ser yo, para encontrar la tranquilidad en el corazón vacío, para permanecer abierto al milagro a través de los pensamientos despersonalizados: ése era su objetivo. Cuando todo el yo se encontrase vencido y muerto, cuando se callasen todos los vicios y todos los impulsos en su corazón, entonces tendría que despertar lo último, lo más íntimo del ser, lo que ya no es el yo, sino el gran secreto.
Siddharta permanecía en silencio bajo el calor vertical del sol ardiente de dolor, de sed; y se quedaba así hasta que ya no sentía dolor ni sed. Se hallaba en silencio durante la estación lluviosa el agua corría desde su cabello hasta sus hombros que sentían el frío hasta sus caderas y hasta sus piernas heladas, y el penitente continuaba así hasta que los hombros y las piernas ya no sentían frío, hasta que se acallaban Se mantenía sentado en silencio sobre el bardal, hasta que le goteaba sangre de la piel caliente, y después de las úlceras. Y Siddharta continuaba erguido, inmóvil, hasta que ya no le goteaba la sangre, hasta que nada le punzaba hasta que nada le quemaba.
Siddharta estaba sentado con rigidez y trataba de ahorrar aliento de vivir con poco aire, de detener la respiración. Aprendía a tranquilizar el latido de su corazón con el aliento, aprendía a disminuir los latidos de su corazón hasta que eran mínimos, casi nulos. Instruido por el más anciano samana, Siddharta se entrenaba en la despersonalización, en el arte de ensimismarse según las nuevas reglas de los samanas. Una garza voló sobre el bosque de bambú y Siddharta absorbió a la garza en su alma; voló con ella sobre el bosque y las montañas; era garza, comía peces, sufría el hambre de la garza, hablaba el idioma de la garza, sentía la muerte de la garza. Un chacal muerto se hallaba en la orilla arenosa, y Siddharta entraba en el cadáver: era chacal muerto, yacía en la playa, se hinchaba, apestaba, se descomponía; sintióse descuartizado por las hienas, decapitado por los cuervos; se tomó esqueleto, y polvo, y el vendaval se lo llevó.
El alma de Siddharta regresó; había muerto, se había convertido en polvo..., había probado la triste borrachera del ciclo. Ahora aguardaba con una sed nueva, como un cazador, el hueco donde podría escapar del ciclo, donde empezaría el fin de las causas y de la eternidad, del dolor. Mataba sus sentidos, destrozaba su memoria, salía de su yo y entraba en mil configuraciones extrañas: era animal, carroña, piedra, madera, agua. Y cada vez se encontraba así mismo al despertar; brillaba el sol o la luna, de nuevo era él, se movía en el ciclo, sentía sed, vencía la sed, y volvía a tener sed.
Siddharta estudió mucho con los samanas. Aprendió a andar por diversos caminos para alejarse del yo. Anduvo por el camino de la despersonalización a través del dolor, a través del sufrimiento voluntario y del vencimiento del dolor, del hambre, de la sed, del cansancio. Caminó por la despersonalización a través del pensamiento, de vaciar la mente de toda imaginación. Se enteró de estos y otros métodos, mil veces abandonó su yo; durante horas y días permanecía en el no-yo. Pero aunque los caminos se alejaban del yo, su final conducía siempre de nuevo hacia el yo. Aunque Siddharta huyó mil veces del yo, permanecía en el vacío, en el animal, en la piedra, no podía evitar el regreso, como era imposible escapar de la hora en que vuelve uno a encontrarse bajo el brillo del sol o de la luz de la luna, en la sombra o en la lluvia. Y de nuevo era el yo y Siddharta, y sentía otra vez la tortura del ciclo impuesto."
(SIDDHARTHA, Herman Hesse. 1922)

lunes, 3 de enero de 2011

Intervención del Banco Central en el Tipo de Cambio


El Banco Central ha decidido, finalmente, intervenir el tipo de cambio con una compra programada de divisas a lo largo de este año 2011. La compra de US$ 12.000 millones incrementará la posición de líquidez del Banco Central a un equivalente del 17% del PIB.

En parte del comunicado emitido por el Banco Central, sostiene su compromiso con la meta de inflación y la libre flotación del tipo de cambio: "El Consejo del Banco Central reitera su compromiso con el esquema de conducción de la política monetaria, basado en una meta inflacionaria y flotación cambiaria." Pero a su vez aduce: "Asimismo, nuestro esquema de flotación admite intervenciones en situaciones excepcionales.". Si bien, como se argumenta en el artículo anterior de este blog, Chile presenta una pérdida importante de competitividad derivado de la apreciación de su tipo de cambio (es decir, los bienes nacionales son ahora relativamente más caros que los extranjeros, deteriorando la demanda por bienes chilenos en el exterior), tampoco hay que olvidar los efectos positivos en el consumo y en la inflación que se producen ante una moneda apreciada. Las importaciones entran "más baratas", por tanto, el precio de los combustibles e insumos importados para el funcionamiento de las industrias son adquiridas a un precio más bajo.

Si bien el Banco Central reafirma su compromiso con la inflación y un tipo de cambio flexible, las señales que se dan al mercado interviniendo el tipo de cambio dejan de manifiesto que ante ciertos escenarios el Banco Central puede ceder ante ciertas presiones, lo que indirectamente puede acarrear (potencialmente) una pérdida de credibilidad en sus políticas futuras.

Ante un escenario donde el precio del cobre, probablemente se mantenga alto por varios meses, lo lógico es que se realizara algún tipo de intervención. Lo perjudicial de todo esto, es que cuando una institución se compromete ante el mercado en seguir ciertas pautas y delineamientos, se desvie de aquellos, por objetivos que, en teoría, no están bajo su control o en sus compromisos. Y si se desvía, se expone en el futuro a cuestionamientos ante decisiones ya tomadas, derivados del antecedente creado en el presente

En pos de la eficiencia, una de las mejores opciones es mejorar las procesos productivos de las empresas exportadoras y aumentar su eficiencia globalmente a través de todas las áreas disponibles en cada organización. Esto las llevaría a tolerar un tipo de cambio más bajo que el actual, derivado de los menores costos que enfrentarían.